Las renuncias de los rectores del CNE
Las renuncias de los rectores del CNE
Los rectores del Consejo Nacional Electoral asociados al chavismo han presentado sus renuncias, la Asamblea Nacional "renunciará" a los demás.
La noche del 14 de junio nos enteramos de la propuesta del Orden del Día para el jueves 15, el cual incluía la aceptación de la renuncia de algunos Rectores Principales y Suplentes del Consejo Nacional Electoral.
Las “renuncias”, que no creo que sean muy voluntarias, fueron presentadas por el Presidente del CNE Pedro Calzadilla, el Rector Principal Alexis Corredor, el Rector Suplente Incorporado Carlos Quintero y cinco suplentes adicionales ligados al chavismo. Esta movida efectivamente paraliza el funcionamiento del CNE y lo deja abierto para el nombramiento de nuevos rectores, por parte de la Asamblea Nacional 2020, que pueden llegar a ser incluso más favorables al chavismo de lo que era Calzadilla.
A todas estas, el CNE aún no había dado respuesta sobre la solicitud de asistencia técnica que presentó la Comisión Nacional de Primaria, con el propósito de cuadrar la asistencia que dará el órgano electoral (y determinar su nivel de involucramiento) con la primaria promovida por la Plataforma Unitaria Democrática. Mientras que, en teoría, el CNE aún puede trabajar en su respuesta a la solicitud de la CNP sin tener todos sus rectores designados y juramentados, creo que es mejor presumir que no harán tal cosa y que la situación de las renuncias presentadas es un intento de estancar el proceso de la primaria, aunque este no sea su único propósito.
El tema de la participación del CNE en la primaria es álgido y ha sido el foco de mucha división entre los precandidatos opositores y los partidos que integran la Plataforma Unitaria. La persona más vocal en contra de la participación del CNE en la primaria ha sido María Corina Machado y su partido Vente Venezuela. Machado ha argumentado, en repetidas ocasiones, que permitir la participación del CNE en la primaria es igual a darle entrada plena al régimen para que manipule y distorsione el proceso opositor desde adentro.
La situación actual de paralización del ente gubernamental favorecé, por mucho, el argumento de Machado de que el CNE es el gobierno y que, por tal razón, no puede ser incluido en el proceso. Algo de fuerza tiene este argumento de Machado ya que esto vuelve a demostrar que el CNE es supremamente frágil y, en cualquier momento, puede ser destruido y reconstruido por el gobierno de Nicolás Maduro en la medida que él lo prefiera.
La falta de claridad sobre la participación del CNE en la primaria retrasará su organización, empezando porque Machado, y quienes piensan como ella, tendrán buena razón para seguir retrasando su propia inscripción mientras esperan una respuesta de la CNP. Durante esta paralización podremos ver como las divisiones internas opositoras sobre la participación del CNE se profundizan más, complicando la unidad y el proceso en general.
Por supuesto, profundizar aquellas divisiones internas es un objetivo del gobierno de Maduro, como también lo es desmotivar a los electores de oposición y alejarlos del voto, aunque la oposición ha contribuido mucho a esto también. Juan Guaidó se pronunció el mismo miércoles 14, diciendo que la primaria deberá ser “autogestionada” y que la respuesta de la oposición debe ser una de “unión”. Esto parece dejar a Guaidó firmemente en el bando de Machado, el bando anti-CNE en la primaria, mientras esperamos las reacciones de los demás precandidatos como Henrique Capriles Radonski, quienes tendrán que tomar decisiones firmes pronto o quedar como unos guabinosos o, peor, colaboracionistas.
Yo espero ver al gobierno aprovecharse de la ausencia de rectores nombrados para estancar la organización de la primaria y profundizar esas divisiones. El mismo jueves 15, los diputados chavistas en la Asamblea Nacional 2020 Francisco Ameliach y Jorge Rodríguez (Presidente de la AN), anunciaron que el órgano legislativo va a proceder a nombrar todos los rectores del CNE, esto incluye a Roberto Picón y Enriqe Márquez quienes no presentaron renuncias. Por los momentos, Calzadilla anunció públicamente que los rectores que renuncian permanecerán en sus cargos hasta que se nombren sus reemplazos, algo que presumo le aplicará también a Picón y Márquez.
Esto le ha dado a la Asamblea Nacional 2020 una oportunidad de purgar el CNE en su totalidad, quedando libres para designar los rectores que les de la gana, parciales a la corriente política oficial del PSUV, algo que el chavismo podía hacer cuando le daba la gana y han escogido hacerlo ahora. Encima de nombrar un CNE completamente chavista, la AN 2020 podría sustituir a Picón y Márquez con nuevos rectores ligados a una de las “oposiciones” falsas. Aquella decisión tendría el beneficio de hacer show democrático, habiendo tenido la posibilidad de llenar al CNE de chavistas pero dejando algunos puestos para la “oposición”, cuando en realidad lo que han hecho es volver todo más enredado y complicado. Imaginen si la persona que nombran es leal a la Acción Democrática alacrán, imaginen la confusión de la gente que desconoce que hay dos AD. Desastre.
Adicionalmente, esto es un recordatorio de que al gobierno le importan las elecciones y les duele ser tan poco populares. Robarse la elección no es tan fácil como abrir y cerrar los ojos, conlleva riesgos. Ciertamente el régimen hará todo lo posible para voltear los resultados a su favor pero ellos desean tener más votos que la oposición. Si ellos pudiesen simplemente cambiar los numeritos al final y “ganar” sin consecuencia alguna entonces harían eso y ya. En vez, los vemos preparando todas las trampas posibles para aumentar sus chances de sacar más votos que el candidato opositor. Quieren legitimarse internacionalmente y asegurar a los aliados internos de que aún pueden ganar elecciones, especialmente después de poner a todos nerviosos con la purga.
El gobierno quiere que la gente se abstenga y han contado con la ayuda de la oposición en este terreno. La oposición venezolana pasó todo 2018 diciendo que en dictadura no se vota, ahora esa misma gente se ha volteado y han lanzado sus candidaturas a la presidencia. ¿Qué cambió? Bueno, no han sabido explicarlo y, dolorosamente, parecen ser incapaces de explicarlo. Ahora pretenden que si vamos a votar todos podemos alcanzar un resultado que el gobierno aceptará y se irán de Miraflores. La gente no es estúpida y está cansada de que los traten como bobos. A la gente hay que hablarles con honestidad, hay que explicar las dificultades, hay que explicar por qué ahora sí se va a votar y hay que tener un plan claro de defensa del voto, hay que asentar expectativas realistas. Sin esos esfuerzos por parte de la oposición, no llegaremos a ningún lado. Sin ese trabajo, el régimen la tendrá bien fácil.